Exactamente cien años después del inicio de las obras para la construcción del Collegio di Spagna el becario Antonio de Nebrija ingresa en la institución albornociana con la intención de proseguir sus estudios universitarios. Al ápice de su fama como arquitecto, León Battista Alberti, en aquel mismo 1465 se halla en Mantua con el séquito del papa Pío II, está trabajando en el diseño de los proyectos para la construcción de la iglesia de San Sebastiano. El estudiante sevillano y el intelectual toscano, no obstante no mantuvieran ningún contacto, dada su pertenencia a diferentes generaciones y clases sociales, legarán a la historia su común inquietud idiomática humanística, los dos se plantearán el problema de cómo y con qué medios se debía verificar la comunicación entre los intelectuales y el poder. Alberti promocionará el toscano con I libri di familia y con la Grammatica Toscana , en la que propone una tabla de signos ortográficos que deja translucir su vena artística (De pictura). Nebrija, dentro de los muros del Colegio de San Clemente empezará a pensar que su lengua materna y el latín, poseían similar dignidad, y en 1492 da a la imprenta la Gramática de la lengua castellana, inaugurando de este modo la gramaticografía europea. El arquitecto morirá en 1472, dos años después de que el filólogo en ciernes dejara el Colegio boloñés para volver a España. De este modo queda inaugurado, gracias a un arquitecto y a un filólogo, el activo movimiento de defensa e ilustración de las diferentes lenguas romances nacionales, que en el futuro inmediato va a encontrar sostenedores e intérpretes en toda Europa.
RODRIGO, M. (2018). El arquitecto y el gramático: Leon Battista Alberti y Antonio de Nebrija. Bologna : Bononia University Press.
El arquitecto y el gramático: Leon Battista Alberti y Antonio de Nebrija
RODRIGO MORA, MARIA JOSE'
2018
Abstract
Exactamente cien años después del inicio de las obras para la construcción del Collegio di Spagna el becario Antonio de Nebrija ingresa en la institución albornociana con la intención de proseguir sus estudios universitarios. Al ápice de su fama como arquitecto, León Battista Alberti, en aquel mismo 1465 se halla en Mantua con el séquito del papa Pío II, está trabajando en el diseño de los proyectos para la construcción de la iglesia de San Sebastiano. El estudiante sevillano y el intelectual toscano, no obstante no mantuvieran ningún contacto, dada su pertenencia a diferentes generaciones y clases sociales, legarán a la historia su común inquietud idiomática humanística, los dos se plantearán el problema de cómo y con qué medios se debía verificar la comunicación entre los intelectuales y el poder. Alberti promocionará el toscano con I libri di familia y con la Grammatica Toscana , en la que propone una tabla de signos ortográficos que deja translucir su vena artística (De pictura). Nebrija, dentro de los muros del Colegio de San Clemente empezará a pensar que su lengua materna y el latín, poseían similar dignidad, y en 1492 da a la imprenta la Gramática de la lengua castellana, inaugurando de este modo la gramaticografía europea. El arquitecto morirá en 1472, dos años después de que el filólogo en ciernes dejara el Colegio boloñés para volver a España. De este modo queda inaugurado, gracias a un arquitecto y a un filólogo, el activo movimiento de defensa e ilustración de las diferentes lenguas romances nacionales, que en el futuro inmediato va a encontrar sostenedores e intérpretes en toda Europa.I documenti in IRIS sono protetti da copyright e tutti i diritti sono riservati, salvo diversa indicazione.